La Municipalidad de Colón difundió un mensaje al conmemorarse este jueves los 204 años de la Independencia.
En ese sentido, el Ejecutivo local recordó la gesta patriótica y realizó un repaso histórico sobre aquellos días de los albores del siglo XIX, cuando el sueño de ponerle fin al dominio español comenzaba a hacerse realidad.
Trayendo una reflexión sobre la actualidad, desde la Municipalidad consideraron que “sigue en disputa la independencia de otros imperios”, y agregaron: “Lo que está claro es que el pueblo quiere recuperar su dignidad y su alegría”.
Finalmente, desearon que “pronto podamos encontrarnos para celebrar y abrazarnos. Mientras tanto, hay que cuidar de nuestras vidas en un contexto inédito; eso comprende las responsabilidades del Estado para atender la salud de todos los sectores y las necesidades de los más vulnerables”.
El texto completo
El 9 de julio de 1816, el Congreso reunido en Tucumán declaró la independencia “del rey Fernando VII, sus sucesores y metrópoli" y pocos días más tarde se agregó al texto de la declaración: “y de toda otra dominación extranjera”.
El trámite fue sencillo. Se propuso el tratamiento del «proyecto de deliberación sobre la libertad e independencia del país». Pero no hubo debate, y nació sin traumas la declaración de la independencia.
Lo complejo habían sido los 6 años anteriores. Y lo serían las campañas que iniciaría San Martín para liberar Chile y Perú, cruzando los Andes, al igual que los sucesivos períodos de nuestra historia en que hubo de sostenerse la independencia, a pesar de las contradicciones y tensiones.
El 10 de julio tampoco fue traumático. Por lo contrario, hubo bailes y festejos. Ahí mismo, en la casa de Tucumán y en la plaza.
Los congresales siguieron sesionando en la casa del Gobernador. Allí nombraron a Pueyrredón como Director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata. Y partió para reunirse en Córdoba con San Martín.
Los bailes siguieron y hubo peñas, danzas y guitarras. "Se había esperado mucho para declarar la Independencia y la gente quería expresar su alegría" dice Felipe Pigna, y describe incluso las cualidades de bailarín de Belgrano -en una de esas jornadas de festejos- y hasta la elección de la reina, que sería "la rubia de la Patria".
En las calles también había banderines y guirnaldas. Y nuestra bandera, asociada a la liberación del coloniaje. Es así que el Congreso la declaró símbolo nacional el 20 de julio de 1816. Aunque nos represente a todos, es cierto que suele utilizarse invocando valores bien distintos de aquellos que le dieron origen y alejados del espíritu de San Martín o Belgrano.
En suma, había costado sangre terminar con el dominio español. Costaría terminar con el imperio británico. Y sigue en disputa la independencia de otros imperios. Lo que está claro es que el pueblo quiere recuperar su dignidad y su alegría. Y seguir bailando.
Ojalá pronto podamos encontrarnos para celebrar y abrazarnos. Mientras tanto, hay que cuidar de nuestras vidas en un contexto inédito; eso comprende las responsabilidades del Estado para atender la salud de todos los sectores y las necesidades de los más vulnerables. También, la responsabilidad social para cuidarnos entre todos, de manera solidaria.